Historia de vida

LA VIDA DE MARTÍN Y LA SOLEDAD DE LAS DROGAS…
Martín, es el nombre hipotético dado a un joven de 28 años que se encuentra en proceso de rehabilitación  y que fue pieza clave en la elaboración de los análisis desde cada uno de los enfoques incluidos en la  aproximación investigativa, los autores del núcleo establecieron   una relación crono-sistémica con las etapas del desarrollo de este adulto joven que  están seriamente relacionadas con todos los factores predisponentes mencionados anteriormente, ello se evidencia en la ausencia de una familia en la niñez, el padre desconocido y una madre trabajadora que permanecía ausente del hogar, los amigos de Martín lo influencian fuertemente para que   inicie el consumo de sustancias psicoactivas a los 9 años, esto sumado a la cercanía con lugares donde se expendían este tipo de sustancias.
En la vida del protagonista de la historia no hubo familia que direccionara su vida, reglas o pautas de crianza responsables, sus amigos moldearon y modelaron sus conductas, le enseñaron el valor del dinero, a la edad de 10 años Martín se relacionaba con personas de 15 y 16 años que pertenecían al mundo de las drogas, “hacia mandados y lavaba automóviles para conseguir el dinero y poder comprar sustancias” 
Martín se encuentra solo, rodeado de personas y lugares que tienen que ver con droga, decide entonces abandonar el hogar materno a los 12 años y comenzar una vida laboral  como operario de maquina plana, pero la droga sigue presente en su vida, la adolescencia empieza entonces con excesos de todo tipo.

 El camino de la droga continua y los espacios  de la vida de Martín se van reduciendo, las fiestas, el consumo constante hacen que deje su trabajo como operador de maquina plana y comience su vida de infractor,   a los 15 años ingresa  a un centro de reclusión por atraco a mano armada,  en este lugar se rodea de adolescentes infractores y drogadictos que no aportan nada positivo a su vida.
Es allí donde conoce a Sara una mujer drogadicta y establece una relación sentimental con ella, Martín se enamora y Sara queda embarazada pero ella sostiene que un hijo de dos drogadictos no tiene futuro y decide abortar y abandonar a Martín.  
 Martin intenta recuperarse  y busca la ayuda  de su madre y esta lo interna en un centro de rehabilitación, lugar de donde se escapa, para convertirse en un habitante de la calle, harapiento, drogadicto, deambula por las calles, pidiendo limosna para comprar cualquier tipo de droga, Martin ha tocado fondo la droga ha degrado de tal forma su vida que lo ha convertido en un mendigo
 Con esa fuerza que caracteriza los seres humanos, Martin de nuevo busca ayuda y ahora se encuentra rehabilitándose, consciente de su problema lucha por encontrar una salida, pero ahora no está solo, hay un grupo especializado que lo ayuda.  

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